martes, 22 de mayo de 2018

"EL PROFESOR" DE LA FORMULA 1: ALAIN PROST...

Buen día, amable lector:

En el deporte siempre han existido rivalidades y comparaciones entre ciudades, equipos, jugadores y aficionados, lo que genera un sin fin de sentimientos al vencer a nuestro acérrimo rival, además de llenar de adrenalina el desarrollo de un partido o en este caso una carrera, pues el protagonista de la anécdota de esta semana es ALAIN PROST, un piloto de fórmula 1 que brilló en los 80s y que protagonizó una de las más grandes rivalidades deportivas del automovilismo con Ayrton Senna.

Esta anécdota va de la mano con mi etapa como adolescente en Guadalajara, donde esperaba los sábados no para irme de fiesta, si no para madrugar y disfrutar las carreras de grandes premios de Fórmula 1 que iniciaban en la madrugada, como el Gran Premio de Suzuka, Japón y el Gran Premio de Australia en 1988, lo cual representaba un gran sacrificio que siempre terminaba por valer la pena, disfrutando ver las hazañas de mis grandes ídolos como Alain Prost, Emerson Fittipaldi, Nigel Mansell, Nelson Piquet, Niki Lauda y Ayrton Senna.

El automovilismo tuvo gran apogeo en aquellos años y su servidor tuvo un gran amor por dicho deporte, siendo un buen complemento hacia las demás disciplinas y tuve la gran fortuna de disfrutar este tipo de eventos muy interesantes, además de mucho aprendizaje para mí.

Alain Marie Pascal Prost nació el 24 de Febrero de 1955 en Saint-Chamond, Francia y es considerado como uno de los mejores y más exitosos corredores de autos en la historia dentro de la Fórmula 1, imponiendo marcas que duraron muchos años vigentes hasta el principio de esta década con la gran era de Michael Schumacher.

“El Profesor” inició su carrera como profesional en 1980 con McLaren-Ford en el Gran Premio de Argentina, sin embargo comenzó su andar en las pistas desde principios de los 70s en certamenes europeos donde se gestaron sus primeros triunfos, siendo campeón en 1978 y 1979 en la Fórmula 3 Francesa, sumado a un título de F3 Europea en 1979; su primera campaña en el máximo circuito sobre ruedas estuvo plagado de accidentes y no obtuvo los resultados esperados, pero era el comienzo de una prolifera carrera para el francés.

De 1981 a 1983 se enfundó con la escudería de Renault y ganó sus primeras carreras, siendo 5to en su primer año con el equipo y se quedó con el subcampeonato en el 83 tras un fallo del motor de su monoplaza, lo cuál fue criticado por el propio Prost y eso no causó mucha gracia en Renault, generando su despido pero eso sería un gran aliciente para “El Profesor” en sus años posteriores en el automovilismo.

Para 1984 retornó a McLaren donde iniciaron sus mejores años en la F1, terminando de nueva cuenta como sublíder a 0.5 puntos del campeón de dicho año, precisamente su co-equipero Niki Lauda, siendo una campaña aplastante para la escudería sobre sus rivales pero no para Prost, a quien se le denominada “El Rey sin Corona” tras haber obtenido 7 victorias en el certamen.

Un año más tarde lograría su consolidación como campeón al sumar 5 primeros lugares, además de que un par de años más tarde tendría como compañero de equipo a Ayrton Senna, sin embargo tuvieron momentos muy tensos por una rivalidad que estaba más que cantada, lo que generaría mucha expectativa a finales de los 80s entre dos pilotos que dominaban el circuito y que los campeonatos se definían entre ambos, aún siendo de la misma escudería.

Prost pasaría al equipo italiano de Ferrari en 1990, quienes volvían al plano competitivo con el francés liderando sus unidades y haciéndole frente a su acérrimo rival Senna, quien tenía la ventaja de tener monoplazas más desarrollados y con mejor alcance, sin embargo, Ferrari se colocó por encima de Williams-Renault y sólo era superado por el equipo de McLaren; Alain Marie tomaría un año sabático en el 92 tras no considerar como competitiva a la Escudería de Ligier, con quienes había sido ligado para correr en ese año.

Su cuarto título de F1 llegaría en 1993 a bordo de una unidad de Williams-Renault, quienes le dieron el voto de confianza a Prost con un monoplaza muy bien diseñado que estaba a la par de los mejores del circuito, ganando 7 carreras y sumando 99 puntos para ser líder y campeón en aquella muy galardonada campaña; ese mismo año anunciaba su retirada de las mejores pistas del mundo como piloto.

Años más tarde regresaría a la F1 pero ahora como dirigente de su propia escudería llamada Prost Grand Prix, comprando a Ligier y participando desde 1997 al 2001, terminando esa etapa a inicios del 2002 tras el quiebre del equipo.
Posteriormente incursionó en el automovilismo sobre hielo en Francia, donde obtuvo los títulos de 2007, 2008 y 2012, además de fundar en 2014 la escudería e.dams Renault junto a Jean-Paul Driot, participando en la Fórmula E.

“El Napoleón de los Circuitos” ganó 4 títulos de Fórmula 1, además de otros 4 subcampeonatos, completó 199 premios con 51 victorias y 106 podios, sumando un total de 798.5 puntos y 41 vueltas rápidas.
Fue distinguido Legion d’Honneur (1985), Campeón de Campeones (1998), es miembro del Salón Internacional de la Fama de los Deportes Motorizados desde 1999 y obtuvo el Premio Mundial del siglo en deportes ese mismo año.

Sin duda alguna fue un piloto adelantado a su época y disputó los grandes premios en la era dorada del automovilismo mundial, ligado siempre a su rivalidad con Ayrton Senna y caracterizado por su estilo para conducir, mismo que lo llevó a un tetracampeonato en su carrera.

Me despido de ustedes queridos amigos, enviándole un cordial saludo a Hugo González y Antonio Sánchez Valdovinos, buenos y grandes conocedores del tema de la F1; además de dedicarle esta anécdota a un gran aficionado al automovilismo en Culiacán, quien sigue todos los grandes premios en la actualidad y que por cierto me debe la invitación a uno: mi compadrito Carlos González Peinado.

Nos escribimos pronto, amigos...

Jorge Luis Sánchez Dávalos
jorge.deportes@hotmail.com

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