sábado, 31 de octubre de 2020

EL ETERNO CAPITÁN: FRANCESCO TOTTI

 Buen día, amable lector:

Muy pocas son las historias de una relación eterna entre deportista y club, una era moderna donde la economía manda en la gran mayoría y que la lealtad a los colores se rompe muy fácilmente, sin embargo, en esta ocasión les escribo sobre un italiano que jugó 24 años con el equipo de sus amores, recibiendo innumerables ofertas pero que antepuso la fidelidad e ideología personal sobre el dinero: FRANCESCO TOTTI.


Esta anécdota me gusta mucho, ya que siempre se me hizo muy interesante el equipo del AS Roma, y claro, su gran jugador estrella, el mítico Francesco Totti, conociendo las afueras del Estadio Olímpico de Roma junto a mi linda esposa.


Recordando a Totti junto a Batistuta y muchas grandes jugadores excepcionales, pero que siempre eran liderados por ese jugador fiel a sus colores, derrochando el buen futbol con el equipo de sus amores: La Roma.


Francesco Totti nació el 27 de Septiembre de 1976 en Roma, Italia y durante su carrera dentro del futbol se caracterizó por ser un gran mediocampista ofensivo que lo llevaron a marcar una época en su país, siendo el máximo golearos del AS Roma con 307 tantos y único club al que perteneció en toda su etapa como profesional, además de ser el tercer máximo anotador en la Serie A de Italia con 250 goles, sólo detrás de Silvio Piola y Giuseppe Meazza.


Su amor con “La Loba” comenzó en 1989 cuando se integró al equipo juvenil del conjunto de la capital italiana, debutando en la Serie A de Italia el 28 de Marzo de 1993 cuando la Roma ascendió al máximo circuito, llegando hasta el 28 de Mayo del 2017 cuando se retiró oficialmente y tras ganar múltiples títulos, entre ellos una Serie A, dos Copas de Italia y dos Supercopas de Italia, siendo el jugador con más partidos disputados con la escuadra giallorossa.


En el plano internacional, participó con el selectivo juvenil de su país desde 1993 a 1996, para luego integrarse a la Selección de Italia que disputó dos Copas del Mundo y en par de Eurocopas, siendo parte importante del conjunto Azurri que se coronó monarca en la edición de Alemania 2006 en la máxima justa del futbol mundial, ese certamen donde se impusieron en penales sobre Francia y que redondeó una era donde el futbol italiano se imponía en todos los sentidos en los eventos deportivos.


“IL CAPITANO” también se hizo acreedor de diversos premios y designaciones individuales, destacando un Guerin d´Oro, una Bota de Oro, una Bota de Plata, además de ser incluido en la lista de los 100 Futbolistas FIFA de Pelé, así como ser condecorado como Caballero de la Orden al Mérito de la República Italiana en el año 2000, sumado a lo logrado en 2006 cuando recibió el Collar de Oro al Mérito Deportivo y ser nombrado Oficial de la Orden al Mérito de la República Italiana, demostrando ser todo un profesional dentro y fuera de las canchas.


Tras su carrera como jugador profesional después de 890 partidos, se preparó para continuar en las canchas pero ahora desde los banquillos, siendo todo un ejemplo para muchos jóvenes deportistas y que ven en él, a toda una institución con valores y referente del futbol mundial.


Me despido de ustedes con un saludo muy especial para mis grandes amigos José Ángel Astorga Palazuelos y Valentín Castro, a quien a le obsequié una hermosa playera de la Roma en aquella ocasión.


Dedicando estas líneas a mi esposa Fiorella Mendívil Castro, que en Marzo del 2009 estuvimos de luna de miel en Roma.


Nos escribimos pronto amigos…

Jorge Luis Sánchez Dávalos

Jorge.deportes@hotmail.com 




domingo, 25 de octubre de 2020

Ídolo cruzazulino, "El Grandote de Cerro Azul": Carlos Hermosillo

Buen día, amable lector:

La realidad del futbol mexicano ha entrado en una crisis por diversos factores que han encrudecido las problemáticas ya existentes desde hace varios años, por lo que es muy importante el resaltar la importancia de figuras en cada club para tratar de regresarle los valores a un aficionado que apoya semana a semana a su equipo, como por ejemplo, el Cruz Azul, quienes ya superan las dos décadas de no levantar un título de liga y en ésta ocasión les escribo sobre uno de los protagonistas de ése campeonato de “La Máquina”, un hombre que marcó una época dentro del balompié azteca y que está catalogado como uno de los mejores delanteros mexicanos en la historia: CARLOS HERMOSILLO.


Estamos de regreso en este bonito domingo junto a mi familia y amigos, retomando este espacio con las anécdotas que les escribo con mucho cariño y felicidad, en esta ocasión con un recuerdo que quedó pendiente en torno al al gran ídolo cruzazulino.


El año pasado mi intención era pasar en San Luis Potosí el cumpleaños de una gran persona, un gran ser humano y que fue como mi segundo padre siempre, mi padrino el Ing. José Braulio Sánchez Hernández quien desafortunadamente falleció meses atrás, siendo una sensible pérdida para su servidor y hoy 25 de Octubre cumpliría un año más de vida.


Recuerdo que desde niño, las vacaciones de Semana Santa, Pascuas, Navidad y uno que otro puente, siempre fueron con él y su familia, platicando de futbol y en aquellos tiempos mi primer equipo era el Toluca.


Cuando llego a Guadalajara, cambio mi afición por los Leones Negros de la U de G y finalmente al Cruz Azul, donde en mis inicios como seguidor de “La Máquina” a finales de los 80s, había un jugador olímpico que debutaba como profesional con el América y es cuando mi padrino, con mucho orgullo, nos platicaba el gusto por saber del “Grandote de Cerro Azul”, ya que como ingeniero tuvo la oportunidad de trabajar con el padre de Carlos Hermosillo.


Por cierto, mi prima Elvira Sánchez Martínez es paisana de delantero mexicano, y ya jugando para el Cruz Azul pude compartir momentos en varios partidos con él y su familia, por lo que escribir de ello es una parte importante para mi, recordando momentos familiares, deportivos y, obviamente, las épocas de gloria de mi amado Cruz Azul.


Carlos Manuel Hermosillo Goytortúa es originario de Cerro Azul, Veracruz y nació el 24 de Agosto de 1964, ubicado como el segundo máximo goleador del futbol mexicano detrás de Evanivaldo Castro “Cabinho”, además de ser el quinto mexicano con más goles a nivel selección, caracterizado por su buen juego aéreo gracias a sus 1.89 mts y de grandes cualidades en la definición, mismas que empezó a desarrollar desde su año debut en 1984.


Apodado “El Grandote de Cerro Azul”, Carlos Hermosillo, debutó con las Águilas del América en la Temporada 1983-84, club donde ganó 5 títulos de liga y rápidamente se convirtió en una pieza importante para el cuadro azulcrema, ganando el campeonato en su primera campaña ante el odiado rival deportivo, las Chivas Rayadas del Guadalajara, mientras que un año más tarde marcó en la Final ante Pumas de la UNAM y en la 1988-89 le anotó el gol definitivo del título al Cruz Azul, equipo que sería el más importante en su carrera y donde la afición lo identifica con gran arraigo hasta la fecha.


El veracruzano forma parte de los mejores delanteros que ha tenido el conjunto de Coapa, al lado de figuras como Luis Roberto Alves, Enrique Borja, Octavio Vial, Salvador Cabañas, Fancois Omám Biyik, Christian Benítez, Iván Zamorano y varios nombres más que brillaron con goles para el América.


Para 1989 integra las filas del Standard de Lieja en el futbol belga, llegando al continente en busca de seguir con sus actuaciones goleadores, aventura que no duró mucho debido a la poca participación que tuvo en las canchas y eso derivó en su regreso a México para enfundarse en la playera del Monterrey, retomando el nivel y siendo el líder goleador de los regiomontanos en ese año-


Para la Temporada 1991-92 llegaría al Cruz Azul, institución que marcaría su carrera positivamente, a pesar de haber tenido un inicio complicado por haber pasado por las filas del América y eso no era bien visto por los aficionados cruzazulinos, sin embargo, los goles de Hermosillo fueron hablando por él mismo, ganándose el cariño y respeto de los seguidores del equipo cementero y marcando un total de 88 goles entre las campañas de 1993 y 1996 para ser Tricampeón de Goleo en ese lapso.


La consagración como figura del Cruz Azul tuvo su punto más alto en la Final del Invierno 97, cuando entró como cambio en tiempo extra debido a que presentaba dos costillas rotas y tuvo su participación portando un chaleco protector, recibiendo una patada en la cara del guardameta de León Ángel David Comizzo y dicha acción derivó en un penal a favor de Cruz Azul, mismo que el propio Carlos Hermosillo hizo efectivo para anotar el “Gol de Oro” y con ello darle el título a “La Máquina”, campeonato que sería el último obtenido hasta el momento por dicha institución.


Para 1998 pasa al Necaxa donde lograría el título del Invierno 98 al derrotar a las Chivas en la Final, pasando posteriormente a Los Ángeles Galaxy de la MLS donde marcó 14 goles y dio 15 asistencias en dos torneos que tuvo participación.


En la parte final de su carrera, regresó al América en el año 2000 para jugar la Copa Libertadores, disputando un torneo con el Atlante y finalmente se enfundó en los colores de las Chivas Rayadas del Guadalajara, donde se retiró en el año 2001 como profesional, mientras que un año después tuvo un juego de despedida portando los colores del Cruz Azul en un evento denominado “Amigos de Hermosillo”.


A nivel Selección Nacional, disputó un total de 90 partidos con 35 goles marcados de 1984 a 1997, participando en las Copas del Mundo de México 1986 y Estados Unidos, además de la Copa FIFA Confederaciones de 1995 y la Copa América de 1995 en Uruguay.


Tras su retiro como jugador profesional, incursionó en la política en la gestión presidencial de Felipe Calderón Hinojosa, mientras que desde el 2013 ha participado como analista deportivo en distintos programas de televisión y radio.


En total, anotó 362 goles en el futbol mexicano y 396 en toda su carrera profesional, disputando más de 740 partidos y alcanzando 7 títulos de liga, 3 Copas de Campeones, 2 campeón de campeones y una Copa México.


Me despido de ustedes, no si antes mandarle un abrazo hasta el cielo a tres grandes personas que se fueron de la Fam. Sánchez Hernández, mi padre Efrén Sánchez Hernández, mi padrino José Braulio y mi querida abuelita María de Lourdes Hernández Z. que están juntos en el cielo.


Dedicándole estas líneas a mi padrino Ing. José Braulio Sánchez Hernández que se le extraña, al igual que a María de los Ángeles Martínez, también para la hermosa familia que formaron, José Braulio, Elvira, María de Lourdes, José Iván y José Eduardo Sánchez Martínez, a quienes recuerdo diario con mucho cariño.


Nos escribimos pronto, amigos...


Jorge Luis Sánchez Dávalos

jorge.deportes@hotmail.com